25/05/2020
Beneficios de la fijación adhesiva en Sistemas de Aislamiento Térmico por el Exterior
Durante miles de generaciones, el ser humano ha intentado preservar el calor dentro de sus hogares. Muchos de los inventos y mejoras de la construcción han enfocado sus esfuerzos a este ámbito. Y, tras muchos sistemas fallidos, hemos conseguido un método más sostenible para conseguir el aislamiento térmico por el exterior.
Imagina que tienes que rehabilitar un edificio del casco antiguo (siempre y cuando no sea de fachada protegida) de una capital de provincia. Has buscado el método más sencillo, eficaz y que, además, revalorice dicho edificio. Y así has encontrado el sistema SATE, un método que promete todo lo anterior y más.
El sistema SATE, o Sistemas de Aislamiento Térmico por el Exterior, responde a esa necesidad básica: rehabilitar una vivienda sin perjudicar lo más mínimo posible a sus residentes. Los edificios de las grandes metrópolis, que quieren mejorar en ahorro energético y estética, podrían utilizar este modelo innovador para empezar una nueva vida tanto dentro como fuera de sus estructuras.
Sistemas de Aislamientos Térmicos por el Exterior, un vistazo rápido
Como ya sabrás, el sistema SATE consiste en colocar un material aislante adherido al muro mediante fijación adhesiva o mixta (adhesiva y mecánica). Gracias a que el material aislante se fija directamente al muro, produciendo un aislamiento continuo a lo largo de la fachada, se evita la aparición de puentes térmicos en el edificio. Acabamos así con las pérdidas de energía y la transferencia de temperatura entre el interior y exterior de la vivienda.
Responde así al eje económico de la sostenibilidad de múltiples formas, porque también acaba con desperfectos (elimina grietas, fisuras y garantiza la desaparición de humedades) y responde a la normativa contra incendios según el CTE (pues es un material muy resistente al fuego). Además, el mantenimiento es mínimo, ya que solo necesita revisiones sencillas cada cinco años.
Muchos edificios que necesitan rehabilitación eligen el sistema SATE debido a su fácil aplicación y comodidad para los residentes
¿Qué hay de los otros dos ejes de la sostenibilidad? También es respetuoso con el medio ambiente pues, al conservar la temperatura del interior, disminuye la necesidad de calefacción (hasta un 30% de ahorro en energía, sumando dos o tres grados de diferencia (Recordemos que, por cada grado de más en la calefacción se eleva hasta un 8% la factura) y la emisión de CO2 que ello supone. Una ventaja que ayuda a mejorar la certificación ambiental del edificio como las tipo LEED, BREAMM…
En cuanto a las personas, el sistema SATE ofrece aislamiento contra la contaminación acústica. ¿Y qué hay de su instalación y mantenimiento? No ocupa espacio útil dentro de la vivienda ni hay que hacer nada desde el interior. Esto mantiene la calidad de vida de los habitantes de la estructura. Estas dos ventajas también tienen mucha relación con la fijación que hayas decidido incorporar.
Fijación del sistema SATE: cuál debo elegir
Los materiales de fijación que se suelen utilizar son de dos tipos: mecánicos y adhesivos. Esto significa que, para fijar el panel a la fachada, se puede utilizar un adhesivo cementoso unido al anclaje mecánico o un adhesivo químico unido al anclaje mecánico
Si nos centramos en obra nueva, la fijación química en forma de espuma SATE puede ser uno de los sistemas de fijación más rápidos del mercado. Permite la instalación de los paneles aislantes en tan solo 30 minutos, a diferencia de los adhesivos cementosos, aumentando en gran medida el ritmo de la obra, consiguiendo los resultados mucho más rápido. Gracias a la buena planimetría de las fachadas de obra nueva, se conseguirán rendimientos de 10 m2 en tan solo 30 min.
En el caso de rehabilitación de fachadas existentes, dado que el soporte estará desnivelado y con errores en su planimetría, este adhesivo tiene la facilidad de poder corregir los desniveles hasta 3 cm en los primeros 15 minutos de su instalación. Esta instalación express disminuye también las molestias a los vecinos que viven en el edifico que se está rehabilitando ya que el tiempo de instalación se disminuye de poder realizar el anclaje en dos horas frente a dos días.
Aun así, la clave de una buena fijación en estos Sistemas de Aislamiento Térmico por el Exterior es el adhesivo que vayamos a utilizar. Y aquí también hay una tipología a considerar.
Dos de tres fijadores adhesivos en el sistema SATE
La función del adhesivo es primordial, no solo por agarrar el material aislante sobre la fachada, también restringe la dilatación, contracción y compresión del aislamiento y ajusta su planicidad. Según su naturaleza, hay tres tipos, aunque nos vamos a centrar en dos, porque el adhesivo de dispersión suele utilizarse sobre paramentos de madera o soportes con fibras de madera, mientras que los otros dos son útiles para un mayor número de aislamientos y soportes.
La fijación adhesiva es óptima y se combina junto fijación mecánica en rehabilitación de fachadas
Por un lado está el cemento adhesivo. Se usa en soportes minerales, como el ladrillo o el hormigón, y se puede aplicar en cualquier tipo de aislamiento. Esto limita la rehabilitación de algunas fachadas, aunque un gran número están hechas de estos materiales. Es posible trabajarlo en climas adversos con precipitaciones, y Este adhesivo se prepara mezclando los materiales en un cubo, mezclando con agua. Su uso en la actualidad es, ante todo, porque corrige las zonas menos uniformes de la superficie, rellenar los posibles huecos y también influye su precio competitivo.
Piensa en esa gran fachada de un edificio del centro de tu ciudad, en pleno abril, con un clima lluvioso que no favorece la mezcla de materiales que dan como resultado el cemento adhesivo. Añade también las 48 horas mínimas de curado que necesita. Puede tardarse hasta una semana en terminarse la fachada, resultando en un método poco eficiente para lo que se supone que es el sistema SATE, más rápido y sencillo que otros sistemas.
Nuestra apuesta en fijación adhesiva
Para solventar los problemas de los dos anteriores (baja versatilidad y tiempo de preparación) tenemos la espuma adhesiva SATE. Este tercer tipo es de aplicación universal para todo tipo de soportes (madera, hormigón, ladrillo, vidrio, metal…) y para todo tipo de aislamiento EPS. El formato más usual es en espuma de alta densidad y baja expansión.
Volvemos a esa fachada de tu ciudad en pleno mes de abril, durante esa semana en la cual solo ha dejado de llover un día. Pues bien, gracias a que no necesita preparativos y que el agarre inicial es muy rápido, en tan solo tres segundos, es el método perfecto para trabajar.
Pero hay más: su gran maleabilidad y posibilidad de rectificación hace que la espuma sea perfecta ante los posibles desperfectos e inconvenientes que incorporan las fachadas antiguas, respetando siempre la estética clásica. Además, la espuma corrige hasta 3 cm de diferencias en desniveles de la fachada.
Rehabilitar por la sostenibilidad
Ya hemos visto que los tres tipos de fijadores adhesivos responden al eje ambiental que promete el sistema SATE. Pero los Sistemas de Aislamiento por el Exterior que quieran potenciar los demás ejes deberán la espuma adhesiva, pues no solo es más rápido, universal y de aplicación fácil ante cualquier circunstancia (por lo tanto, más económico) sino que también requiere de menos complementos para aplicarse (estorbando menos en la calle y haciendo más sencilla la vida de los residentes).
La rehabilitación de un edificio se hace en defensa de una mejoría de calidad en todos estos aspectos. Y tú, ¿qué adhesivo elegirías?
Fuentes: IADE, Calor y Frío, Calor y Frío